Mientras los medios masivos de comunicaci?n salvadore?os difunden las noticias sobre la violencia que ahora flagela la sociedad, poco se habla y no se profundiza sobre la violencia que sufren las mujeres.
Las cifras de feminicidios se ha escalado desde el 2001, con 211 mujeres asesinadas ese a?o, para el 2002 la cifra de los asesinatos de mujeres fue de 227, en el a?o 2003 ya pasaba de los 300 y entre enero y agosto del 2006 la cifra reportada fue de 286.
La tasa de mujeres asesinadas por a?o se encuentra en una media de 285, asesinatos reportados que se arrojan como cualquier n?mero que no es considerado al hacer el reporte de asesinatos generales, pero que tienen una connotaci?n especial dentro de nuestra sociedad.
A eso no se le suman los diferentes cr?menes cometidos contra las mujeres tales como violaciones, abusos f?sicos y verbales que ellas sufren como parte de la marginalizaci?n de la mujer en todos los sectores de la vida cotidiana.
En muchos casos las violaciones sexuales no son reportadas a causa de la falta de apoyo y se encuentran casos en donde la polic?a ni siquiera toma importancia en estos asuntos, provocando impunidad para que cr?menes de este tipo se incrementen.
Es obvio que la sociedad salvadore?a posee patrones de conducta culturales, sociales y econ?micos que contribuyen a la discriminaci?n de la poblaci?n femenina, resultando en que ha esta se reafirme la marginaci?n y la desigualdad por causa de genero.
Llena de consternaci?n que en el alto porcentaje de feminicidios que han sido cometidos se observan se?ales de tortura, violaci?n sexual y mientras estos suceden, las investigaciones policiales y las instituciones jur?dicas no logran encontrar a los culpables, ni tampoco las defienden.
Mientras tanto los medios de comunicaci?n contribuyen analisar estos asesinatos como un mal endemico que pertenece a los crimenes comunes y no de los patrones culturales contra la mujer, lo cual no conduce a educar ni cambiar los patrones machistas existentes para reducir el ambiente agresivo que existe contra la poblaci?n femenina dentro de la sociedad.
El estado salvadore?o se ha negado a firmar acuerdos y ratificar protocolos para la eliminaci?n de todas formas de discriminaci?n contra la mujer, no permitiendo que el recurso de ley pueda ser un recurso ante la Corte Internacional de Derechos humanos en beneficio de la mujer salvadore?a, vulnerada en la sociedad; y asi, bajo este mismo patr?n excluyente las cifras arrojadas en el sinn?mero de asesinatos de mujeres cometidos a?o con a?o, pasan a llenar las cifras de muertes dentro de la sociedad sin considerar el problema de la discriminaci?n y marginaci?n de la mujer.